Jueves 14 de mayo de 1998, Lausana, Suiza. Comité Olímpico Internacional
Tenía 9 años Cuando supe que llegaría el Comandante Fidel Castro a Lausanne y que la visita del museo olímpico era abierta a todos, sentí que era una ocasión única para poder aunque sea apercibir a un héroe del pueblo como Fidel.
Como vivía en un país francófono y para que no me olvide de mi lengua materna, mi mama me solía leer el diario del Che por las noches antes de dormir. Sentía una gran admiración por los luchadores de la justicia, la justicia de todos, la del Che y Fidel. Su ejemplo dejo en mí las ganas de seguir la lucha esté donde esté y pase lo que pase.